Por lo áspero a las estrellas. Breve historia de la Escuela Normal de Jujuy.

En 2002, cuando volví a Jujuy y visité la Escuela Normal.

Por ridículo que resulte imaginarlo fue exactamente así. En algún parlante sonaba el «Da ya think I’m sexy» de Rod Stewart mientras yo iba caminando de la mano de mi madre por las anchas galerías. Acababa de terminar el acto de fin de curso, coronado con una suelta de globos. A mí me había tocado uno con forma de conejo. Los globos debían llevar un mensaje de paz, aunque paradójicamente era 1978. No recuerdo qué escribí en la tarjetita atada al hilo del mío, sólo guardo la vaga impresión de verlo soltarse de mi mano y, junto a tantos otros, volar hacia el firmamento y perderse. Vuelvo al primer momento: Rod Stewart (años más tarde supe que era Rod) y de la mano con mi madre, pensando a quién le podría llegar mi mensaje de paz, y qué sería exactamente la paz, abstraída del hecho de que nos íbamos, de que por última vez cruzaba sus patios con palmeras, sus antiguas galerías y que por muchos años no volvería a recorrer el edificio de mi amada primera escuela, la Escuela Normal de Jujuy.

En uno de los patios de la Escuela Normal, junto a mi querida maestra Azucena Salado Vargas y recordadxs compañerxs (1979).

He aquí una breve historia de la Escuela Nacional Normal Superior Mixta «Juan Ignacio Gorriti«, obtenida del cuadernillo impreso con motivo del centenario de dicha institución.

Basándose en la Ley del 13 de octubre de 1875, sancionada por el Presidente don Nicolás Avellaneda, que autorizaba la fundación de Escuelas Normales de Maestras de Instrucción Primaria en las provincias que lo solicitaren y que ofrecieran locales adecuados a tal fin, el Sr. Gobernador de Jujuy, don Eugenio Tello y su Ministro de Gobierno, Dr. Manuel Padilla, propusieron para ello el edificio que hasta entonces había utilizado el Colegio Nacional.

Para alegría de las familias jujeñas, el Presidente don Julio A. Roca y Ministro de Instrucción Pública, don Eduardo Wilde, por decreto del 1° de febrero de 1884, crearon la Escuela Normal de Maestras y designaron su personal: Directora y profesora, Srta. Juana Stevens (educadora norteamericana de brillante actuación en su país) Vice-directora y profesora, Srta. Teodora Gay. Profesoras para el Departamento de Aplicación: Srta. Felisa Rasgido y Dolores Villegas (quien no llegó a hacerse cargo y fue reemplazada por Delfina Villafañe); para las tareas administrativas se desempeñaron las Sras. Matilde González de Claros (también profesora de Labores y Economía Doméstica) y Elisa de Tezanos Pinto de Ovejero (Bibliotecaria) y la Srta. Delfina Santibáñez (ayudante).

Todas trabajaron intensamente para poner en marcha la Escuela, en estrecha colaboración con la comunidad jujeña. En esa época las alumnas debían rendir un examen de capacidad después de su inscripción. De acuerdo con los resultados ingresaban el Curso Preparatorio o en uno de los cuatro grados de la escuela de Aplicación.

Como homenaje a las srtas. Directora y Vice-directora se fijó el 4 de julio para la iniciación de las clases, coincidiendo con la conmemoración de la Independencia de su patria natal, los Estados Unidos de Norteamérica.

Al finalizar cada año escolar se aprobaban mediante exámenes todas las asignaturas; cumplido este requisito, en 1886 ingresaron en Primer Año las niñas que habían superado el curso preparatorio. Entonces se incorporaron nuevos profesores: Dr. Joaquín Carrillo (Gramática e Historia), Dr. Antonio Baldi (Anatomía, Fisiología e Higiene), don José Cuñado (Aritmética), Sra. Urbana de Irigoyen (Lectura, Declamación, Escritura y Ortografía), don Luis Langón (Francés), Srta. Delfina Santibáñez (Dibujo), Srta. Pura Cervetto (Música), Sra. Dolores de Alcorta (pianista para clases de gimnástica), Srtas. Rosario Santillán y Fidelia Cuello (Directoras de grado).

Escudo de la Escuela Normal año 1977-78

El Segundo Año del Curso Normal se habilitó en 1887, pero recién al año siguiente se produjeron grandes cambios; se incorporó un jujeño, egresado de la Escuela Normal de Paraná, para desempeñarse como Regente del Dpto. de Aplicación: el doctor Octavio Martiarena. Se modificaron los planes de estudio integrando dos nuevas materias: Botánica y Zoología, en el Tercer Año, que debían aprobarse mediante exámenes. Todas las alumnas lo hicieron y el 3 de noviembre de 1888 recibieron sus diplomas las primeras once maestras de Jujuy: Rita Alvarado, Irene Almaráz, Adela Bárcena, María Blas, Juana Castañeda, Concepción Cicarelli, Agustina Corte, Juana Orías, Dolores Sánchez, María Sánchez y Lía Torres.

La srta. Stevens consideró imprescindible el funcionamiento de un Jardín de Infantes anexo a la Escuela y consiguió con sus incesantes gestiones, que fuera creado en 1897. La srta. Pía Didoménico fue designada Directora del Jardín.

En 1900, el Curso Normal de la Escuela de Maestros pasó a depender del Colegio Nacional y el Dpto. de Aplicación de éste fue incorporado a la Escuela Normal. Funcionaron entonces, totalmente independientes entre sí, dos Deptos. de Aplicación (niñas y varones), ambos bajo la dirección de la Srta. Stevens. Recién en 1914 la Escuela adquirió el carácter de «mixta».

La profunda fe católica que impulsó a la primera directora de la Escuela Normal a alejarse de su patria natal, la hizo también sacrificar su carrera docente. Al prohibirse la enseñanza religiosa en los establecimientos oficiales, prefirió retirarse al Buen Pastor a educar a las niñas asiladas allí, antes que aceptar una «enseñanza sin religión».

La sucedieron en la Dirección brillantes educadoras que impulsaron el, desarrollo del establecimiento, merecedor, en repetidas oportunidades, de la calificación de «escuela modelo».

Nómina de directivos de la Escuela Normal de Jujuy desde su creación.

Como el alumnado aumentaba considerablemente, era necesario construir un edificio adecuado para albergar las tres secciones. El Gobierno de la Provincia expropió una manzana céntrica y, con los fondos enviados por el Gobierno de la Nación, se inició la construcción del nuevo local escolar. Lamentablemente esos fondos no fueron suficientes y las obras se suspendieron. Gracias a la intervención de un profesor del establecimiento, el Dr. José S. Salinas que ocupaba a la sazón el Ministerio de Justicia e Instrucción Pública Nacional, los trabajos pudieron reiniciarse. En 1925 se inauguró oficialmente el nuevo edificio.

Banderín para la Escuela Normal, diseñado por la Prof. Ofelia Bertolotto de Mendoza (década del 60)

El Presidente de la Nación, don Marcelo T. de Alvear, por decreto del 27 de julio de 1928, impuso el nombre de «Juan Ignacio Gorriti» a la Escuela Normal. Las ex-alumnas solicitaron con insistencia, aunque  infructuosamente, que se cambiara este nombre por el de «Juanita Stevens«, lo que demuestra con claridad el cariño y el respeto que ella despertara en la comunidad jujeña.

En 1939 y por iniciativa de la secretaria de la Escuela, sra. Irene Haydeé García de Moreno, se organizó el archivo. Ese mismo año se constituyó el Departamento de Educación Física que, desde entonces, desplegó una fructífera actividad en todos los aspectos de la vida escolar; participación en campeonatos deportivos, fiestas de la Educación Física y del Estudiante, carrozas, campamentos educativos, fichaje físico-médico de alumnos, entre otras.

Hasta 1941 el Curso-Normal se desarrolló en cuatro años. Luego, como en todo el país, se modificó al establecerse el Ciclo Básico de tres Años y el Ciclo Superior o Magisterio, de dos años. En 1950 se agregó un año, motivo por el cual no egresaron maestros, pero al año siguiente se suprimió este sexto año y recibieron sus diplomas dos promociones juntas (una de sexto y otra de quinto año).

El Club Colegial se creó el 14 de agosto de 1947 y participó eficazmente en todas las actividades de la escuela, actuando como nexo entre el alumnado y la Dirección. Al conmemorar los 75 años de vida de la escuela se adoptó, como lema distintivo, el de Juanita Stevens; «Per aspera ad astra” -“Por lo áspero a las estrellas”-, que figura desde entonces, en todos los actos y recordaciones escolares.

Banderín para la Escuela Normal, diseñado por el Prof. Jorge Augusto Mendoza (década del 60) .

El Instituto del Profesorado, anexo a la Escuela Normal, se creó en 1959 bajo la dirección de la Sra. Irene H. G. de Moreno (a la sazón directora de la escuela), con cuatro especialidades: Matemática y Cosmografía, Química y Merceología, Inglés, Castellano, Literatura y Latín. Tres años después se constituyó en entidad escolar independientes aunque continuó utilizando el local del establecimiento.

La Biblioteca se creó junto con la Escuela y, con el aporte generoso de la comunidad jujeña y los libros que el Ministerio de Educación envió desde Bs. As., se fue incrementando su fondo bibliográfico. Más adelante, tanto la Asociación Cooperadora como el Club de Padres (Dpto. de Aplicación) y otros organismos hicieron llegar sus contribuciones. Hoy posee preciadas colecciones al servicio del proceso enseñanza-aprendizaje y de las inquietudes de superación de los alumnos.

En 1966, por orden del Ministerio de Educación de la Nación, se cambió la denominación de los grados primarios ordenándolos de «Primero» a «Séptimo» y suprimiendo el nombre de Primero Inferior y Primero Superior a los dos primeros grados del nivel. En 1968 se implantó la enseñanza por áreas en el Dpto. de Aplicación que desde su creación y hasta 1982 funcionó con tres divisiones por grado. Recién en 1983 se creó la cuarta división de Primer Grado; las creaciones seguirán progresivamente por promoción anual.

Naranjos y nieve. La vereda de la Escuela Normal de Jujuy por calle Lavalle (veromendo, 2009)

En 1968 el plan de estudios correspondientes a la carrera de Magisterio fue suprimido y se implantó en 1969 el Bachillerato con Orientación Pedagógica, que fue a su vez desplazado en 1971, por la entrada en vigencia de los planes de los Bachilleratos Orientados: Ciencias Físico-Matemáticas, Letras y Común. Sin embargo, era posible obtener el título de Bachiller con Orientación Pedagógica, cursando cuatro materias más, distribuidas en los dos años del ciclo superior de cualquiera de los bachilleratos orientados. A partir de 1974 se implantó el Bachillerato con Orientación Docente en las cinco divisiones de curso (4° y 5° Años), que fue reemplazando paulatinamente a las otras orientaciones con el objeto de conservar, de alguna manera, el sentido original de esta casa de estudios: la formación de futuros docentes. En 1975, el Profesorado para la Enseñanza Primaria que, desde su creación, dependía del Instituto Nacional del Profesorado, pasó a integrar la unidad de la Escuela Normal, con una división por curso (1° y 2° Años). En este mismo año se crea el Profesorado de Educación Pre-escolar, con el ámbito propicio para el desarrollo de actividades de Práctica de la Enseñanza en el Jardín de Infantes de la Escuela.

En el año 1993, por Ley Nacional que descentralizó la educación, la Escuela Nacional Normal pasó a depender de la provincia aunque bajo el mismo nombre. Con reconocimiento de estructura y funciones y con la misma validez de los títulos, tal como venía ocurriendo. El personal transferido mantuvo equivalencia jerárquica en su nueva situación.

Escuela Normal de Jujuy durante la nevada de agosto de 2009. Frente por calle Independencia (veromendo).

Desde el año 1996, el edificio de la Escuela Normal fue declarado Monumento Histórico,  pasando a integrar el Patrimonio arquitectónico y cultural de la Provincia.

Otras referencias

  • «Historia de nuestra Escuela Normal y el porqué de su Nombre de ‘Juan Ignacio Gorriti’ ” en https://ifdc3-juj.infd.edu.ar/sitio/historia/
  • Sobre la vida de Juana Stevens, el libro «Por lo áspero a las estrellas«, escrito por don Marcos Paz (Gómez Rubio, D., Síntesis de la Historia de la Cultura de Jujuy, 1977. Ediciones Culturales NOA. Dirección Provincial de Cultura de Jujuy).